
¡Cada gota cuenta!
Este diciembre, Madrid esta acogiendo la COP25, “Conferencia de las partes”, donde la gestión eficiente del agua se aborda como parte integral de las soluciones requeridas para mitigar la crisis derivada del cambio climático.
Paradójicamente, mientras el agua destaca en la agenda para el cuidado del medio ambiente, muchos continúan considerándole como un recurso renovable, lo cual es incorrecto. La disponibilidad de este recurso imprescindible para la vida va mermando producto de la sobreexplotación a que ha sido sometido, muy por encima de su capacidad natural de renovación.
En España, nos enfrentamos cotidianamente al problema, y aunque por ahora contemos con suficiente agua para beber, la escasez sí que afecta a la producción agrícola, y a los grandes consumidores industriales. La gestión de aguas residuales es una de las vías en el campo del reciclaje, donde las empresas instaladoras podemos jugar un papel muy importante. Podemos contribuir a la gestión racional del agua buscando aplicar sistemas novedosos que permitan su reutilización. En una de nuestras instalaciones más recientes, el equipo de Zetus se ha empleado a fondo en el reciclaje de aguas grises y pluviales, consiguiendo resultados que demuestran la viabilidad y eficacia de dichas contribuciones.
Sistema para la reutilización de Aguas Grises y Pluviales
La iniciativa de nuestros ingenieros, siempre en función de contribuir a la construcción sostenible, ha fructificado en esta instalación para la recuperación de aguas grises y pluviales, realizada en un local comercial de la calle Espronceda de Madrid. El reto planteado durante el diseño de este sistema de recuperación de agua era el de incorporar el mayor número posible de puntos de recuperación de agua para su tratamiento y reutilización sin elevar los costes significativamente.
Recuperación de aguas grises:
Para la recuperación de aguas grises de este proyecto, Zetus ha contado con uno de los sistemas de ROTH, el “Aquaserver 300”, diseñado para reutilizar, en la descarga de los inodoros, las aguas grises provenientes de los cuartos de baños. El sistema cumple con todas las exigencias normativas y es adecuado para la instalación en locales comerciales.
El conjunto Aquaserve 300 consta de:
- Depósito Rothagua de 650 litros para recepción de aguas grises.
- Consola técnica.
- Depósito acumulador de aguas tratada.
El depósito Rothagua de 650 litros contiene un reactor biológico con filtro de membranas para filtrar el agua separando los sólidos suspendidos, materia orgánica, jabones etc. Además, incluye una sonda para medir el nivel de las aguas grises.

La consola técnica, por su parte, consta de los siguientes componentes:
- Un cuadro de control con el temporizador programable que gestiona el tiempo de funcionamiento del sistema, controlando automáticamente el reciclaje de las aguas grises;
- Una entrada de agua potable de la red, capaz de alimentarse mediante una electroválvula, en caso de falta de aporte de caudal de aguas grises;
- Una salida de agua tratada;
- Un soplante de aire. El aire se utiliza para la impulsión del agua tratada, y en el proceso de oxidación biológica que se produce en el reactor biológico con filtro de membranas.
- Un dispositivo para controlar la presión del agua reciclada en la instalación.
Por ultimo, el depósito acumulador de aguas tratadas incluye una bomba de agua para bombear el agua tratada hacia los puntos de consumo y un sistema de control del nivel del agua (que incluye tanto la entrada de agua potable de la red, como el agua reciclada).
El siguiente esquema muestra el funcionamiento del sistema Aquaserve 300:

Este sistema, a la vez que permite un ahorro importante en el consumo de agua, es respetuoso con el medio ambiente, ya que su sistema de membranas biológicas es totalmente natural, por lo que no aporta ningún producto químico al agua y no genera residuos.
¿Cómo Zetus hace uso de este sistema en su diseño de recuperación de aguas grises?
Una persona gasta entre 15 y 20 metros cúbicos de agua potable cada año en la cisterna del inodoro. De ahí la importancia de aprovechar el agua consumida para ser reutilizada en las cisternas.
Lo novedoso de nuestro proyecto consiste en las fuentes de aguas grises para ser tratadas y reutilizadas. Mientras convencionalmente se tratan las aguas grises de lavabos y duchas para ser usadas en las cisternas de los inodoros, nosotros hemos incorporado al sistema las aguas grises provenientes del drenaje y condensado que producen algunos de los equipos que forman parte del sistema de refrigeración del local.
La Figura 3 ilustra los puntos o fuentes de aguas grises que nuestro proyecto incluye para ser tratadas mediante el sistema Aquaserver 300:
- Agua consumida en los lavabos.
- Agua del sistema de refrigeración:
- Drenaje de los sistemas de refrigeración evaporativa.
- Condensados de los fancoils.
- Condensados del recuperador de calor.

El agua recogida desde estos cuatro puntos entra por gravedad en el depósito Rothagua de 650 litros del sistema Aquaserver 300. Una vez que el depósito está lleno, el reactor biológico con filtro de membranas se encarga de oxidar la materia orgánica y filtrar los sólidos suspendidos y los microorganismos del agua.
El agua filtrada se acumula aparte en un depósito cerrado para aguas limpias. Para nuestra instalación, hemos escogido el depósito del tipo Rothagua de 700 litros de capacidad, que es el que mejor se ajusta a las necesidades o consumo de agua en nuestra instalación. El agua tratada se impulsa con una bomba sumergida en el depósito para ser utilizada en los inodoros.
El equipo cuenta con un sistema automático para la entrada de agua potable de red al depósito de agua limpia, si el nivel de agua reciclada está por debajo de un nivel inferior determinado.
Este proceso permitirá un ahorro de agua estimado en 300 litros por día, lo que constituye un gran beneficio a nivel económico y medioambiental.
Recuperación de aguas pluviales:
El local comercial de la calle Espronceda cuenta con un hermoso patio interior con plantas, que ayudan tanto a embellecer el espacio como a mantener una agradable temperatura.

El patio interior del local se encuentra al aire libre, por tanto, al caer la lluvia se irrigan tanto el suelo, como las jardineras con diferentes tipos de plantas. En el suelo hay sumideros típicos de exterior, y en el fondo de las jardineras hay desagües. Ambos elementos tienen la función de conducir el agua hasta un depósito RDBA 3000 que hemos situado en la sala técnica situada debajo de este patio.
Este depósito tiene, a la entrada, un filtro de aguas pluviales ROTH de tipo horizontal para evitar la entrada de materiales sólidos relativamente grandes, dejando pasar el agua. Como se muestra en la figura 4, su funcionamiento es sencillo. El agua de lluvia entra al cartucho del filtro (1), donde se limpia para continuar cayendo al deposito a través del equipo anti-remolino (2). Por último, la suciedad extraída al agua de lluvia se evacúa rápidamente al desagüe, debido a la inclinación del filtro y a su superficie lisa (3)

Una vez que el agua filtrada está en el depósito, este se lleva nuevamente a las jardineras para regar las plantas, ¡Un ciclo de reciclaje perfecto! Para este fin se han desplegado una red de tuberías conectadas a cada jardinera, y una bomba para impulsar el agua y hacer que cada planta reciba el agua que necesita.
¿Qué pasa si no llueve durante mucho tiempo, o no llueve lo necesario? Para estos casos, la bomba cuenta con una boya que detecta cuándo el depósito está vacío. Si detecta que está vacío, llena el depósito con agua de la red. Evidentemente, aquí no se reutiliza agua, pero es un elemento importante para garantizar el cuidado del jardín.
Sabemos que la media de precipitaciones en Madrid es de 450 litros/m2, y como nuestro patio interior mide 200 m2, teóricamente podríamos recoger un máximo 90 mil litros de agua al año, lo cual se puede considerar un ahorro muy importante, poniéndose en evidencia el impacto positivo de la recuperación de las aguas pluviales para un segundo uso.
La capacidad del depósito que hemos utilizado para almacenar las aguas pluviales limpias es de 3.000 litros, un tamaño apropiado para nuestro patio. Hay que considerar que, en época de lluvias como el otoño, se podría superar la capacidad del depósito. En épocas menos lluviosas, como el verano, podría no llenarse ningún día. La selección del tamaño del depósito ha tenido en cuenta tales extremos para un aprovechamiento balanceado.

En Zetus estamos orgullosos de nuestra participación en instalaciones como esta, contribuyendo a que se utilice con responsabilidad el bien más preciado del planeta, origen de vida y fuente de existencia de todos los seres vivos.
Sin duda, es indispensable que reflexionemos sobre la importancia del reciclaje del agua, y que cada uno de nosotros, tanto en el sector empresarial, como el industrial o el doméstico, someta a examen sus patrones de consumo en aras de un estilo de vida que priorice el ahorro y cuidado del agua, porque cada gota cuenta.
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